martes, 28 de junio de 2011

Comenzando un nuevo diario



Ya ha pasado un poco más de un año desde que comencé a escribir en este blog... ha sido una linda experiencia pues he conocido gente muy valiosa, he compartido con mamás y papás de muchas partes del mundo y he aprendido diferentes cosas nuevas. A veces escribir en este espacio me llena de inspiración y de nuevas ideas... últimamente he decidido hacer algo con esas ideas y para ello empezaré a hacer un nuevo diario basándome en un libro escrito por Lisa Sonora: "The Creative Entrepeneur, A DIY Visual Guidebook for Making Business Ideas Real".

Como siempre, quisero compartirles este proceso y a ver qué resulta. Por lo pronto ya tengo la libreta que utilizaré para mi diario emprendedor, compré un sketchbook ecológico de la marca CACHET y lo he personalizado, aquí les muestro unas fotos:




Iniciando un nuevo proyecto, se despide La Mamá de Nicolás.

viernes, 24 de junio de 2011

Macetillas inspiradoras



Hoy quise ecribir esta entrada porque la tarde nublada me llena de calma e inspiración... siempre ha sido así: la brisa fresca por la ventana, moviendo las cortinas; el olor a tierra mojada, a humedad; el cielo con su manto gris y el clima perfecto me llenan de inspiración. Me sumergí por un rato en las carpetas de mi computadora, explorando viejos recuerdos y proyectos y me encontré las fotos de todas las macetitas que he decorado y regalado (no se me olvidan las deudas pendientes que tengo con el giveaway ecológico). Así es que les quise compartir algunas fotos:


En una tarde inspirada, se despide La Mamá de Nicolás.

martes, 21 de junio de 2011

Cómo elegir la escuela de natación






Después de haber escrito la entrada sobre las clases de natación de Nicolás, algunas personitas me preguntaron sobre cómo elegir la escuela adecuada para que los bebés aprendan a nadar. Por ahí estuve investigando y creo que los puntos más importantes que rescato son los siguientes:

  • Es muy importante que el lugar al que piensas inscribir a tu hijo te dé confianza. Debe ser un espacio muy limpio, bien equipado, y con un adecuado control sanitario (por eso de evitar infecciones). El agua debe de verse clara y cristalina.
  • Aunque existen muchas albercas públicas o privadas al aire libe en las que se pueden impartir clases para bebés, lo ideal es que te decidas por una que esté techada (cubierta) y climatizada para que tu bebé esté en un ambiente confortable.
  • El agua de la alberca (o piscina) debe de estar a 32º C aproximadamente, es decir, que al momento de entrar no se sienta muy fría ni caliente (sino todo lo contrario jajaja, templada). 
  • Si por alguna razón no elegiste la matronatación y preferiste que tu bebé nadara con un profesor particular, el espacio debe contar con un lugar adecuado para que veas la clase todo el tiempo.
  • La piscina debe de tener un metro de profundidad aproximadamente, de modo que puedas estar de pie fácilmente y tengas un buen control de tu cuerpo mientras ayudas a tu pequeño en las clases.
  • Asegúrate de que los vestidores/baños no se encuentren muy lejos de la alberca y que estén climatizados para evitar que tu pequeño se resfríe. Será mucho mejor si además cuentan con un espacio adecuado para cambiar a los bebés.
  • Pregunta por la experiencia de los profesores y del personal que labora en la escuela, es muy importante que éstos sean profesionales y que estén capacitados para reaccionar ante una emergencia.
  • Los grupos deben de ser reducidos para que el instructor brinde mejor su atención y apoyo a la clase. Si se trata de clases particulares (en los que los papás no nadarán), el instructor debe de atender exclusivamente a tu bebé.
  • De preferencia debe de haber un horario exclusivo para las clases de matronatación, es decir, que no haya otros adultos o clases utilizando la alberca al mismo tiempo.

Así es que ahí está la información, ahora habrá que emprender la búsqueda, puedes visitar unas tres escuelas para hacer comparaciones y decidir. Además de los puntos mencionados tendrás que considerar la distancia de tu casa a la escuela, los costos de inscripción y las mensualidades, así como el gasto que tendrás que hacer por el equipo que te soliciten.

Esperando que muchos pequeñitos se aventuren en la piscina, se despide La Mamá de Nicolás.

lunes, 20 de junio de 2011

Las clases de natación de Nicolás



Desde que Nicolás era más pequeñito, siempre tuve ganas de meterlo a clases de natación. Varios expertos coinciden que un bebé puede empezar a nadar a partir de los 3 o 4 meses de edad, cuando su sistema inmunológico ya es un poco más fuerte, sostienen mejor su cabeza y, además, todavía cuentan con reflejos innatos que le ayudarán a adaptarse al agua y que a partir de los 8 meses pierden y es necesario aprender (como cerrar la boca y aguantar la respiración en el agua).

Cuando Nicolás tuvo la edad recomendada, no me di el tiempo de investigar y después llegó el invierno y ya no se me antojó llevarlo a nadar con el frío. A principios de este año inauguraron una escuela de natación muy cerca de nuestra casa y pedí informes, pero coincidió con que Nicolás había estado enfermito y desde ese entonces no se ha recuperado del todo. 

Sin embargo, ya que cumplió un año y próximamente iremos de vacaciones a la playa, ya no quise esperar más, así es que lo inscribí a las clases de matronatación de la escuela que les comento. Su primer clase fue un éxito, de verdad la disfrutó mucho e hizo los ejercicios correspondientes con mucha disposición y muy contento. 

Es importante saber que estas clases de matronatación (se llaman así porque la mamá entra al alberca con el pequeño) no tienen la finalidad de enseñar a nadar literalmente, sino que son una forma de estimulación, en la que los pequeños adquieren confianza en el medio acuoso y hacen ejercicios que más tarde les ayudarán a aprender las técnicas propias de la natación. También existen algunos ejercicios que les ayudan a los pequeños a aprender a flotar boca arriba, lo cual es una técnica de sobrevivencia importante. Así es que estoy muy satisfecha por haber tomado esta decisión, sobre todo porque estuve investigando y resulta que la natación tiene muchos beneficios para los pequeños:

  • Al igual que para los adultos, la natación es una actividad muy completa para los bebés, pues les ayuda a desarrollar su coordinación, fortalecer sus músculos, ejercitar el equilibrio y afinar su motricidad.
  • El hecho de ejercitarse "tridimensionalmente" le ayuda al bebé a tener nociones de desplazamiento y distancia y los ayuda a alinear su postura.
  • Nadar fortalece el sistema cardiorespiratorio de los bebés, puesto que los ejercicios de respiración que se practican ayudan a oxigenar su cuerpo y trasladar mejor la sangre.
  • Asisitir a una sesión de entre 30 y 45 minutos (que es el tiempo que duran las clases normalmente), ayuda a que tu pequeño se relaje y duerma mejor después.
  • El hecho de que alguien conocido los acompañe durante la clase (sus papás o abuelos) les ayuda a tener mayor confianza en el agua y en sí mismos, fortaleciendo su autoestima y ayudándolos a conocer sus capacidades y limitaciones. Más tarde será mucho más sencillo que aprenda a nadar (lo que sucede hasta los 4 o 5 años de edad).

Así es que, esto de la matronatación no es mala idea, sobre todo si asistes a una escuela de calidad, que mantenga la higiene necesaria en las instalaciones. Por supuesto hay que saber que asistir a estas sesiones no quiere decir que tu pequeño puede ser autónomo en el agua, siempre deberá estar acompañado de un adulto responsable. También hay que estar atentos a que no tome demasiada agua y que no presente ninguna reacción alérgica a los químicos de la alberca (como decimos en México).

 Por último les comparto algunos tips que me dieron mamás y papás conocidos y la maestra de natación:
  • Al momento de elegir el horario para la clase debes considerar los horarios de tu bebé. Debe haber pasado por lo menos una hora después de que haya comido para que pueda nadar. También considera que no sea su hora de dormir.
  • Las sesiones no deben durar mucho tiempo para que los pequeños no se cansen.
  • La escuela debe contar con el material necesario para trabajar, así como juguetes para entretener a los pequeños. 
  • Asegúrate de que haya monitores y gente que pueda brindar ayuda si es necesario.
  • Nunca hay que forzar al bebé a hacer algo que no quiera o que lo asuste, pues de otro modo después no le gustará esta práctica.
  • Si tu pequeño está incómodo, tiene frío o llora demasiado, lo apropiado es salir de la piscina.
  • Este me encantó: si tu pequeño no ensució el pañal para nadar (los que venden especiales para ello) ¡puedes usarlos de nuevo!, solamente hay que enjuagarlos bien y dejarlos secar al sol (de cabeza para que no les entre tierra).Según otras mamás de la clase y la propia maestra, puedes usarlos hasta 3 o 4 veces.
Como siempre, espero que estos datos les sean de utilidad.

Satisfecha con las clases de matronatación, se despide La Mamá de Nicolás.

martes, 14 de junio de 2011

Espacios de aprendizaje y juego. Los materiales



Siguiendo con la serie de entradas referentes a los espacios de aprendizaje y juego, ha llegado el momento de hablar de los materiales que incluiremos en ellos. Como ya lo he ido mencionando, esto dependerá del objetivo que tenga el espacio que hayas decidido diseñar. Así es que aquí les van algunos puntos que considerar sobre el tema:

  • Al igual que el mobiliario, es importante que los materiales que estén a disposición de los pequeños tengan un tamaño apropiado. Si estamos hablando de herramientas de la vida práctica (como escobas, trapos, vajilla, cubiertos, etc.) es importante que sean de tamaño infantil para que los pequeños los manipulen con facilidad, en este caso entre más parecidos sean al objeto "real" mejor. En cuanto a los materiales para un espacio de arte y manualidades (lápices colores, gises, pinceles, hojas, etc.), tendrás que elegir materiales adecuados a la edad de tus hijos, entre más pequeños sean más grande tendrá que ser el material, pues de este modo será más sencillo de manejar, debido a que todavía su motricidad fina se está desarrollando.
  • Es importante que el material que esté a disposición de tus niños esté muy bien organizado, esto les permitirá elegir mejor cuál utilizar y dónde encontrarlo y volverlo a guardar. Es una buena idea utilizar contenedores o canastas para organizar los materiales y mucho mejor si tienen etiquetas para identificarlos, pues de este modo tu pequeño se irá acostumbrando a leer y encontrarle una utilidad (que en este caso es mantener su espacio ordenado y localizar fácilmente las cosas).
  • Todo el material disponible debe estar al alcance de tus hijos para que puedan utilizarlo libremente, si cuentas con el mobiliario adecuado será muy sencillo cumplir con este aspecto. Es importante que los contenedores que uses para almacenar el material también sea de fácil acceso, es decir, que tus niños puedan tomar el material sin complicaciones (como cerraduras o seguros difíciles de abrir).
  • Si tienes varios hijos es importante que consideres la cantidad de material que tendrás disponible, pues este espacio será compartido por los pequeños y en ocasiones querrán utilizar los mismos materiales al mismo tiempo; esto puede determinar las relaciones que entablan en el juego y que más tarde reflejarán en situaciones cotidianas (por eso es importante que siempre cuenten con tu guía y consejo). Si la cantidad es reducida, es casi seguro que resultará liderazgo por parte de alguno de ellos, en este caso puede que existan peleas por el material y dificultdes para compartir (por eso debes de intervenir para enseñarles a llegar a acuerdos). Si hay grandes cantidades de material, probablemente evitarás discusiones por el uso del mismo, pero también es posible que la interacción sea menor y tus pequeños tiendan más a la actividad individual (sin que esto sea bueno o malo, hay que aprender a trabajar solo y en equipo). Así es que recuerda, que tus hijos cuenten con estos espacios no quiere decir que te puedes desentender de ellos, es más, si participas del juego enriquecerás mucho la experiencia y podrás compartir tiempo de calidad con ellos.
  • Siempre hay que pensar en la seguridad de los chiquillos, así es que al momento de elegir los materiales no olvides tomarlo en cuenta. Piensa en contenedores de plástico, madera o cestas, en el caso de que sean de metal revisar que no tengan bordes filosos (como algunas latas reutilizadas) y que no estén oxidados, la idea es que no puedan romperse fácilmente y lastimar a alguien. Si se trata de material para arte, manualidades, construcción, jardinería, etc. asegúrte de que sean aptos para niños, nada tóxico por supuesto; siempre que vayan a utilizarlos repasa con tus hijos las "instrucciones de uso" y las precauciones que deben tomar (como no metérselo a la boca o tocarse los ojos, por ejemplo).


Como verás el asunto no es tan complicado, solamente es cuestión de analizar estos detalles para tener mejores resultados y que tus pequeños se sientan felices cuando utilicen estos espacios, de este modo estarás motivándolos a jugar aprendiendo.

Deseándoles suerte en sus futuros (y actuales) proyectos, se despide La Mamá de Nicolás.

lunes, 13 de junio de 2011

Espacios de aprendizaje y juego. Construcción y decoración



Como sabrán, últimamente he estado escribiendo algunas entradas sobre la importancia de los espacios de aprendizaje y juego, y cómo desarrollarlos en casa. Hoy quisiera enfocarme a los elementos que necesitamos para poder construir y decorar uno de estos espacios. 

En la entrada anterior recomendaba que los papás que quiseran implementar un espacio de aprendizaje en el hogar, debían pensar el lugar y el objetivo que éste tendría; ya que eso está decidido es momento de pensar en otros detalles:

  • Como ya lo había mencionado, este espacio estará destinado para que tus pequeños desarrollen habilidades, conocimientos y actitudes a través del juego libre y espontáneo. Por esta razón es que, una vez que sepas la utilidad del espacio, busques los materiales adecuados para favorecer el aprendizaje a través de la actividad lúdica.
  • De preferenica, trata de elegir un lugar de tu casa que esté bien ventilado y tenga buena iluminación.
  • El mobiliario que necesites para tu espacio, estará determinado por el objetivo del mismo (arte, manualidades, escritura, lectura, ciencias, cocina, jardinería, construcción, dramatización, etc.)
  • Un aspecto muy importante que debes considerar, es que el mobiliario que elijas para el espacio sea tamaño infantil (mesitas, sillitas, libreros, caballetes, almacenaje), pues todo debe ser de fácil acceso para los pequeños. Recuerda que si piensas colgar objetos, éstos también deben estar al alcance de tus niños. 
  • Es una buena idea considerar una decoración especial para este espacio, si utilizas obras de arte creadas por tus hijos, mucho mejor. Los colores quedan a tu elección (yo sé, a veces hay que coordinar todo con el resto de la casa), pero de preferencia considera colores que les gusten a tus pequeños, o bien, colores brillantes y/o claros que permitan iluminar el lugar y motivar a tus hijos.
  • Al momento de diseñar el espacio, considera que tu pequeño pueda moverse libremente y disponer del lugar necesario para desarrollar las actividades consideradas y jugar. Aunque a veces nos encantaría que el espacio contara con TODO lo necesario, en ocasiones debemos sacrificar algunas cosas con el fin de alcanzar nuestra finalidad, que es que tus hijos se diviertan y aprendan; cuando hay un exceso de estímulos, muchos objetos y materiales, se tiende a generar desorden y la disperción.
  • También es bueno que consideres que, es muy probable, que tus pequeños inviten a otros niños (o hermanos) a utilizar este espacio... tener una silla extra, nunca está de más.
  • Si estás pensando en crear un espacio en que que tus hijos utilicen materiales "potencialmente desastrozos" (jajaja, lo sé exageré), me refiero a pinturas, arcilla, tierra, harina, etc. recuerda que después trandrás que limpiarlo, por lo que es importante elegir materiales que te faciliten esta tarea (pisos de cerámica o tapetes de plástico, manteles vinílicos, pintura lavable, etc.). También puedes aprovechar este pretexto para enseñarle a tus hijos buenas costumbres de orden y limpieza, por lo que agregar pequeños trapos, escobas, trapeadores y cubetas es una buena idea (en el método Montessori lo utilizan mucho). 
  • Si estás pensando en un espacio "musical" considera que tus vecinos (u otros miembros de la familia) tal vez se quejen por el ruido, así es que ubícalo en un lugar retirado y bien aislado (o prepárate para las quejas jajaja).




Por ahora creo que estos puntos te pueden mantener ocupada, con ellos puedes comenzar a diseñar el espacio y hacer algunas elecciones. En la siguiente entrada hablaré sobre los materiales que puedes incluir en estos espacios para que tus pequeños los manipulen, jueguen y aprendan.

Esperando a tener tiempo para comenzar su propio proyecto, se despide La Mamá de Nicolás.

jueves, 9 de junio de 2011

Espacios de aprendizaje y juego. Cómo empezar



Hace un par de días escribí una entrada en la que les mostraba algunas fotografías que había encontrado en la red con ideas para crear espacios de aprendizaje y juego en casa. Una de las mamis con las que tengo contacto (Modesta Delgado), me preguntó qué materiales podía utilizar con un presupuesto reducido (creo que hoy en día, la mayoría no podemos dárnos el gusto de comprar TOOODO lo que quisieramos), así es que pensé en profundizar más en el tema, aportar algunos tips y, quizá, algunas mamis y papis se animen a crear estos espacios para sus pequeños. 

Así es que comencemos por el principio (como diríamos aquí en México), como todo en esta vida, el espacio también influye en el desarrollo y la construcción de aprendizajes en nuestros pequeños; aunque no nos detengamos a pensarlo con mucha seriedad, la manera en la que está organizado el espacio en el que pasan la mayor parte del tiempo nuestros hijos, influye en sus actividades, sus elecciones y hasta en su forma de relacionarse con los demás. 

Por esto es una excelente idea crear en nuestras casas, espacios diseñados especialmente para que nuestros hijos jueguen y aprendan, a veces la mesa del comedor o el piso de la sala no son suficientemente motivadores (ni adecuados) para que los niños jueguen y aprendan (tampoco quiere decir que esté mal utilizar estos espacios). Pero bueno, aquí van algunos puntos que me parece que les podrán ayudar a emprender un proyecto de este tipo:

  • Los espacios de aprendizaje pueden ser de diferentes tipos y tener objetivos distintos. Dependiendo de la edad de tus pequeños, de tus preferencias y la de ellos (y del tamaño de tu casa), estos espacios pueden variar en tamaño y funcionalidad. Te recomiendo que antes de comenzar pienses qué es lo que se adecuaría más al lugar con el que cuentas y a las características de tus pequeños. 
  • Decide si este espacio estará en la habitación de tus hijos, en la sala familiar o en una habitación de juegos (piensa en grande, también puedes utilizar otros espacios como la cocina, el garage, el jardín, etc.). 
  • Cuando hayas elegido el lugar, tendrás que decidir la función del espacio, y las actividades que realizarán tus hijos ahí...hay miles de posibilidades: arte y manualidades, escritura y lectura (o lenguaje si prefieres), matemáticas y ciencias, construcción, jardinería, cocina y repostería, experimentación y exploración; o bien un espacio para la dramatización, es decir, un espacio para el juego simbólico, en el que tu pequeño pueda jugar a ser doctor, bombero, mamá, maestra (o cualquier otra profesión). A veces esta elección depende de tus hobbies y pasiones y la de tus chiquitos.
  • Si cuentas con un lugar lo suficientemente amplio y la energía necesaria, podrás construir espacios con diferentes funciones (algo parecido a un aula de preescolar); si te animas con esta opción es importante que los espacios estén bien delimitados y organizados, de esta forma será más sencillo para tus hijos distinguirlas físicamente, aprender a organizarse, conocer para qué sirve cada espacio y decidir con mayor facilidad qué es lo que desea hacer.
  • Si por el contrario no cuentas con suficiente lugar (como en mi caso), tendrás que simplicar tu lista y elegir cuál de todas las opciones es la mejor para ti y tus hijos. Te recomiendo que no trates de abarcar demasiadas funciones lúdicas en un solo espacio, pues resultará contraproductente (exceso de materiales, desorden... caos). Lo que puedes hacer es elegir temas similares y crear espacios integrales y complementarios; por ejemplo, un espacio para la creación artística, manualidades y escritura.

Cuando ya tengas claro lo que harás y dónde lo harás comenzará la parte divertida, que será volver realidad el espacio de aprendizaje y juego, construirlo y decorarlo, pero debido a la extención de la entrada, creo que esa parte la retomaremos en otra ocasión. Por lo pronto ya tienes la tarea de pensar el lugar adecuado para su espacio y la función que tandrá.

Altamente inspirada y motivada, se despide La Mamá de Nicolás.

martes, 7 de junio de 2011

Espacios de aprendizaje y juego



Ya muchos sabrán que desde hace algunos años me dedico a la docencia. Imparto clases en la Licenciatura de Educación Preescolar de una escuela Normal en Querétaro. Pues bien, gracias a este trabajo, he tenido la oportunidad de enriquecer mi conocimiento y aprender cosas nuevas casi todos los días (tanto de mis alumnas, como de mis colegas y lo que investigo).

Hoy estuve revisando algunos materiales sobre la importancia de tener un ámbiente adecuado para que los pequeños aprendan. Normalmente las escuelas a las que enviamos a nuestros pequeños a aprender saben esto y hacen lo posible por crear ambientes alfabetizadores; pero nosotros como papás y mamás podemos crear espacios ideales para el aprendizaje y el esparcimiento en casa. Es cuestión de inspirarnos y pensar en las posibilidades, el espacio puede variar dependiendo de los materiales con los que contemos, el lugar que tengamos disponible, los materiales que queramos agregar y la función que queramos que tenga (he compartido algunos ejemplos de rincones de lectura).

Como les decía para motivar a nuestros pequeños a aprender, todo es cuestión de inspirarnos y poner manos a la obra; aquí les comparto algunas ideas inspiradoras que he ido encontrando en la red.




Esperando que les llegue mucha inspiración para motivar el aprendizaje, se despide La Mamá de Nicolás.


sábado, 4 de junio de 2011

Las señas de Nicolás




Ayer les comentaba que estoy muy contenta de los avances que ha tenido mi pequeño Nicolás en el desarrollo del lenguaje. Desde que empecé a investigar sobre el lenguaje por señas, he tratado de enseñarle algunas cositas a Nicolás, debo confesar que no he puesto el mayor empeño en la tarea, pues en muchas ocasiones olvido relacionar las señas con las palabras o con las actividades que hacemos.

Las que nos han salido muy bien (porque si las practicamos y las usamos frecuentemente) son las señas de "leche", "comer" y "bañar", Nicolás las utiliza siempre y en la forma adecuada, es decir, si tiene sed o hambre, si tiene ganas de bañarse, o bien, si leemos algún cuento en el que los personajes estén comiendo o bañándose. Estas son las señas que les comento para que las conozcan (obtenidas del libro Baby Signing 1-2-3):



Además de estas señas hemos tratado de aprender la seña de "abuela" y "abuelo; "zapatos", "pan", "perro", "agua", "libro", "coche" y "dormir", aunque no nos hemos esforzado tanto. De todas formas seguiremos haciendo el intento a ver qué avances tenemos. Como siempre ya les platicaremos.

Compartiendo más sobre el lenguaje por señas, se despide La Mamá de Nicolás.

viernes, 3 de junio de 2011

Nicolás y el lenguaje al año de edad




Me encanta admirar la manera en que Nicolás crece y aprende. Últimamente he estado muy atenta a su desarrollo motriz, pues está apunto de dar sus primeros pasos solito (camina por todos lados sosteniéndose de las cosas, pero no lo ha hecho sin ayuda), pero también he estado encantada viendo cómo aprende a hablar.

Por mi profesión y mi personalidad, esto del desarrollo del lenguaje me llama mucho la atención, así es que he estado investigando un poco al respecto y les quiero compartir lo que he aprendido (a lo mejor sus pequeños tienen la misma edad que Nicolás).

Es justo en esta etapa cuando los bebés comienzan su etapa lingüística del desarrollo, es decir, que en este momento las palabras comienzan a adquirir significado para ellos (antes solamente las repetían por imitación) y las usan para indicar algo. Alrededor de los 12 meses un bebé puede pronunciar alrededor de 5 palabras (ojo no tiene que ser una palabra como la conocen los adultos), en el caso de Nicolás ya dice muy claramente "mamá", "papá" y "no" teniendo claro que "papá y mamá" son quienes lo cuidan (el "no" lo repite mucho, pero lo aplica para muchas cosas, no sólo para la negación). Además de eso dice no tan claramente "hola" pero si lo aplica para saludar o llamar la atención de alguién y de pronto se le sale decir algo así como "agua" y "nena".

En otras entradas ya les había comentado que he querido enseñarle el lenguaje por señas a Nicolás, la verdad es que no he tenido mucho éxito en esa área porque pienso que no lo he practicado lo suficiente con él; sin embargo, se sabe perfecto las señas de "leche" y "comer" y las utiliza perfecto en varias situaciones, lo cual me da mucho gusto jajaja. También usa la seña de "bañar" y además hace algunas señas más informales como la de saludar y despedirse, "no y sí" con su dedito. Últimamente he pensado seriamente ponerme las pilas con lo del lenguaje de señas porque veo que para él es sencillo y lo utiliza muy bien, lo cual es muy útil en lo que aprende a pronunciar otras palabras y asignarles significado.

Es importante saber que en esta etapa del desarrollo del lenguaje, los pequeños hacen una simplificación del lenguaje que utilizan los adultos, con sólo pronunciar algún sonido o palabra puede estar expresando una idea más larga (algo así como en el lenguaje mandarín), así es que si eres una mamá o papá observador podrás ir descubriendo para qué situaciones utiliza tu bebé ciertas palabras o sonidos (recuerden que aunque para nosotros no signifiquen nada, a lo mejor tu pequeño está expresando algo con el sonido que emite). Puede que tu bebé diga "agua" para asignar cualquier líquido, o bien que diga "mamá" para referirse a cualquier mujer que lo cuide, etc.

Que tu pequeño todavía no se exprese con fluidez no quiere decir que no comprenda lo que le dices, por ello es una buena práctica que platiques mucho con él, que le leas cuentos y que describas algunas actividades sencillas mientras las están llevando a cabo ("vamos a guardar la ropa", "mamá está lavando los trastes", "vamos a ponerte los zapatos"), también se recomienda mucho que en este momento comiences a darle algunas instrucciones simples a tu pequeño, por ejemplo al momento de vestirlo, pídele que dé la mano o que saque un pie a través del pantalón; te irás dando cuenta que comprende lo que le pides y que lo hace.

A partir de este momento, es una buena estimulación enseñarle a tu bebé a pronunciar con más claridad las sílabas, para que más tarde el desarrollo fonético (del sonido) se dé sin complicaciones (como es el caso de los pequeños que no pueden pronunciar ciertas consonantes). Como siempre, es relevante recordar que no todos los niños se desarrollan igual, por lo que no hay que preocuparse mucho si tu pequeño tarda un poco más en hablar (por ahí dicen que las niñas hablan antes que los niños). Yo pienso que lo importante es estar atentos y estimular en lo posible a nuestros bebés para que les sea más sencillo ir aprendiendo y, si de plano ves que no hay avances, consultar con un especialista tus dudas.

Emocionada con el avance de su chiquillo, se despide La Mamá deNicolás.